UN PASEO POR SEVILLA

Más vale tarde que nunca, pero para escribir soy bastante perezosa.

Si para mi a sido solo un paseo, porque solo tres días no dan para mucho.

Después de que el jueves por la noche tubiera que ir de urgencias por un resfriado, que en mi estado y sin poder tomar medicamentos me tenia destrozada, sin haber dormindo un minuto,Sónia con su padre me pasan a buscar a las cinco de la mañana, para ir al Aeropuerto, nos reunimos con Eva y a embarcar, un viaje en avión que me gustaría olvidar, jamás lo había pasado tan mal, no pude parar de toser, mi jarabe en la maleta y gente que no paraba de mirar.

LLegamos a Sevilla sobre las nueve, allí nos esperaba Lorena, que lo primero que hicimos fue ir a desayunar, unas porras con chocolate que estaban de miedo pero me sentaron fatal. Seguido nos reunimos con Lili, dónde nos estubieron eseñando donde se iban a realizar los talleres.



Un poquito más tarde nos reunimos con Betlem, Nati y Tania las alumnas de Sónia que faltaban por llegar y como no las primeras tapitas, pero lo más divertido de ese momento busca la fuente.

Llegada la hora de comer, nos separamos de las chicas y Sónia y yo fuimos a comer a casa de Lorena, que sus padres muy amablemente nos habían invitado; les tengo que agradecer enormemente, la amabilidad que tubieron conmigo que sin conocerme de nada, dejaran que creo que por mi parte una falta de respeto que me ausentara de la comida, y dejaran que durmiera un rato, porque no podía ni con mi alma. Al par de horas aprox. me levanté y como no había comido, no me dio tiempo a sentarme en la mesa, cuando su madre ya tenía la mesa preparada para mí, después de comer un ratito de la más agradable tertulia y mientras Sónia dormia también una siesta, fuimos a buscar a Susana a la estación de tren y reunirnos con Bea y Julia que llegaban en avión, todas de camino a casa de los padres de Lili, que muy amablemente nos dejaron la casa para todo el fin de semana, dejar bartulos, charrar etc. etc.

Llega la hora de la cena todas juntas a un restaurante Marroquí, donde actuaba Lili, con el coincidimos con Eva y Mónica (Makosh), la cena buenísima y la actuación de Lili me encantó, super expresiva y mucha soltura que envidia. Ratito de tertulia, risas cachondeito y momento perchas como nos reimos. Y sobre las dos de la madrugada a dormir, mi mejor momento, siento decir que este fuera mi mejor momento, pero ya llevaba cuarenta y ocho horas sin dormir, exceptuando el par de horitas que pude hacer en casa de Lorena.

A las siete en pie, y cuando las chicas se levantaron yo ya estaba lista, y eso que me daban casi de baja para el día entero y la actuación, verdaderamente que pasé el viernes fatal, pero aguanté. Cinco horas de sueño me sentaron de maravilla y me levanté con las pilas puestas.

Nos fuimos a desayunar, el desayuno, que buenos esos molletes con mantequilla salada, típicos sevillanos y que no comía hacía ya unos años, me sentaron de maravilla, que buenos.

Nos dirigimos al primer taller, que daba Sónia, Gemma y yo estubimos bailando un poquito, haciendo fotos y algún escaqueo que otro más por mi parte.....

Al terminar del taller nos fuimos a visitar la Giralda y alrededores precioso todo, momento calle Siete Revueltas, un momento muy especial, y unas tapitas miestras esperábamos a las chicas de Sónia y todas juntas más tapitas.

Depués recogernos, dirección casa Lili para prepararnos dónde nos encontramos con las demás Zaghareets, y Bea con bértigos sin saber si podrá actuar, cogemos todas las maletas y dirección al pabellon Uruguay, dónde teniamos que actuar, a eso de camino hacia el teatro, las Makosh con rulos puestos paseando por toda Sevilla, que expectáculo.

Terminar de prepararnos, todas mezcladas pinturas, vestuario, lacas de unas y otras mezcladas por allí , y empiezan las actuaciones, que al final Bea y yo si que pudimos bailar, y yo me atreví con todas y la verdad nunca había disfrutado tanto, todas las chicas estupendas y guapísimas. Eso si para mí hubo un momento super especial, y fueron unas castañas asadas, que me trajo por sorpresa Sergio el marido de Lili, que estubo en todo momento super atento, y esto me es que no se como explicarlo, fue un comentario que hice en su coche, que habíamos visto un puesto de castañas, y el vaya ser que el bebé me salga con una castaña, me las trajo, gracias, gracias....

Al terminar las actuaciones nos fuimos todas las Zaghareets junto a las chicas y Lorena, menos Bea que no se encontraba bien, ha cenar por la zona de Triana y a dormir.

Llegó el domingo, otras vez estábamos las más madrugadoras en pie y nos fuimos a desayunar con Lili, Lorena, Mayte (Exótica), las chicas.

Decidimos hacer un poquito de turismo, por los Reales Alcáceres, preciosos y allí Gemma y yo nos despedimos de Sónia, que volvía a dar otro taller y las chicas que asistían.

Nos quedamos solitas Gemma y yo y fueron unos momentos especiales y muy divertidos, seguimos paseando por los jardines de los Alcáceres, siguiendo a pavos reales, ven a ver esto y aquello, y que bonito, pero llegó donde descubrimos un laberinto de setos y como no, una tentación, y para dentro vueltas por aquí y vuetas por allá, alguna trampita pero pequeña, pequeña, pero de eso no digas nada Gemma, que si no nos descubren.

Seguimos paseando las dos juntas, pendientes del teléfono, porque Júlia y Zu tenían que reunirse con nosotras. Gemma y yo seguimos paseando, zona bares y la tentación, otra vez unas tapitas, nos reímos mucho y momento ordenador con el camarero eso de escribir lo que tomas en la barra con tiza de lo más simpatico.

Seguimos dirección a los talleres, donde fuimos parando para comprar detallitos para la família, y otro momento super divertido con Gemma, momento panadería vamos a comprar unos dulces, pero dejaré que lo exlique ella, si todabía me río al recordarlo.

Terminamos reuniendonos todas en el Bar Pelicano, para la última comida en Sevilla, más risas, nos tocaba recogernos para volver camino Barcelona.